Asalto a la gorda del dinero

¡Buenas, cerebro! 

Esta semana sigo dándole vueltas a las consecuencias del amor, mi amor por X Æ A-12. Y, como ya sabrás, a veces, la forma más rápida para acabar en chirona es estar enamorado.

Vaya que lo mío no es un amor cualquiera, no es una relación convencional, de sexo vainilla. Ya te dije en mi carta de hace una semanas que estoy enamorado de nuestra máquina X Æ A-12. No es una amor correspondido, pero yo estoy loco por ella.

Los dueños de la plantación van a sustituirla por una maquina mejor, más joven, más grande. Y no puedo permitir que me arrebaten a mi amor. Así que los punkis de Toledo me han convencido para que sea el perpetrador de una fechoría que se les ha ocurrido.

El plan es el siguiente: mañana es día diez, como sabéis, día de pagos - Lleva la voz cantante El Visto, que tiene cerebro pero la dicción de un macaco de Gibraltar - Sabemos que los señores tienen otra nave de maíz como a diez kilómetros de aquí, así que mañana, cuando terminen de pagarnos aquí, agarrarán el coche y se irán para allá. Propongo que les bloqueemos la ruta y les demos el palo. Si tienen como aquí 10 trabajadores, llevarán un sobre de, por lo menos 12 000 euros, nos lo repartimos entre los seis y aquí paz y después gloria.

-¿Espera, espera, me estás diciendo que cometamos un delito por el que nos pueden caer, yo que sé, diez años de trullo, por lo que podemos ganar en dos meses trabajando? Me parece una estupidez.

  

- No sólo es el dinero, si les desaparecen 12 000 euros, aún tienen que pagar a los trabajadores, perderían 24 000 y no compraría la máquina nueva, ¿qué te parece el plan entonces?

-¿Y las coartadas? ¿Con qué coche lo vamos a hacer?

Eso también lo he tenido en cuenta, dice El Visto, ya vistéis el mes pasado cómo organizó la gorda de la patrona lo de los pagos, con ese teatrillo de señoritos de pagarnos en mano, en metálico, con la cola formada a la puerta de su casa. Primero cobra el Jeremie, el capataz, luego los curritos franceses y los últimos, nosotros, los españoles. Jeremie lleva diciendo toda la semana que en cuanto cobre agarra el coche y se baja a Torrevieja del tirón, que tiene para pagarse un mes de apartahotel. Tú, Orejas te pareces un poco al Jeremie de perfil y ya chapurreas francés mejor que nosotros.

La idea es que te vistas como él, con un polo viejo verde y unos pantalones de camuflaje.  Te pongas un pasamontañas y El Ronqui te llevará en coche hasta lo alto de la loma de la carretera de Viella, desde donde podrá ver venir a la gorde del dinero desde lejos y así bloquearle el paso. Nosotros la seguiremos con la furgo desde lejos, para que no nos vea la matrícula y te recogeremos cuando des el golpe. 

- ¿Y qué le digo: "Bonjour Madame la grosse"? 

- Le sacas la navaja y le dices que te dé la pasta. Y no olvides de usar muchos "impec", "nickel", "trop la classe", las coletillas del Jeremie, para que se piense que eres él. 

Al mismo tiempo, Jeremie estará abandonando el país por la frontera, así que tenemos al cabeza de turco perfecto. Luego bajas por el barranco hasta la carretera de Projan, donde te estaremos esperando.

- ¿y si sale mal? 

- ¿por qué iba a salir mal?

Huelga decir que salió mal.